Naciones Unidas, 14 Ene (Notimex).- El ex secretario general de Naciones Unidas (ONU), Kofi Annan, denunció hoy que muchos gobiernos apuestan a que se mantenga la violencia en Siria, en tanto que socavan todo intento de mediación política.
«Hay gente que no cree en la mediación, que no cree en el proceso político. Piensa que la negociación de la paz lo único que logra es darle más tiempo al presidente (Bashar) al-Assad», expresó Annan, quien fuera el enviado especial para Siria hasta septiembre de 2012.
Durante la presentación de un libro de sus memorias al frente de la ONU, Annan indicó que pese a que la comunidad internacional se manifestó públicamente por el plan de paz que él propuso para Siria en realidad muchos países nunca le dieron su apoyo pleno.
«Esta es la única guerra que he visto en que la gente reza para que no se haga un intento de detenerla, de proteger a la gente y de mitigar lo que pueda pasar», aseveró quien fuera enviado especial de la ONU y de la Liga Árabe para Siria durante casi seis meses.
Annan consideró que de acuerdo con muchos cálculos compartidos por algunos gobiernos y periodistas la guerra podría terminar rápidamente si la oposición armada recibe más apoyo.
El extitular de la ONU explicó que este cálculo, que calificó como «peligroso e injusto para el pueblo sirio», no toma en cuenta que el balance actual de fuerzas sumergirá a ese país en una violencia que podría durar muchos meses más y causar más sufrimiento.
Argumentó que su interés era detener la violencia, y que su objetivo había sido el pueblo de Siria, las verdaderas víctimas de la violencia. Por ello, rechazó que la intervención armada pudiera ser una salida al conflicto.
«Las voces que apoyan un acuerdo político han sido extirpadas. Ahora el enfoque parece estar sólo en lo militar. Y algunos creen por eso que la guerra debe seguir», lamentó.
Advirtió sin embargo que la situación en Siria no se revertiría rápidamente, como sucedió en Irak, sino que arrastraría al país a un «caótico colapso», en que habría asesinatos por venganza y un escenario de limpieza étnica.
Annan no especificó qué países se oponían a la mediación, aunque reveló que algunos gobiernos regionales prefirieron no usar su influencia, cuando pudieron hacerlo, con el fin de persuadir a las partes a negociar un acuerdo político.
Asimismo, criticó al Consejo de Seguridad de la ONU por no mantenerse unido en el tema Siria y por insistir en aprobar una resolución que podría abrir la puerta a sanciones económicas, pese a que ésta no tenía apoyo suficiente.
De acuerdo con la ONU, el conflicto en Siria ha causado la muerte de 60 mil personas desde su comienzo, en marzo de 2011, y al menos cuatro millones de sirios necesitan de ayuda humanitaria para subsistir.
Actualmente, el diplomático argelino Lakhdar Brahimi, representante especial conjunto de la ONU y la Liga Árabe, mantiene los intentos internacionales para lograr una solución negociada al conflicto en Siria.